Ciudad de México.- El expresidente Carlos Salinas de Gortari aseguró que la eliminación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) sería un retroceso para México y Estados Unidos, por lo que hizo un llamado a los gobiernos implicados para reforzar, en lugar de socavar, el acuerdo.
“Eliminar el TLCAN sería un retroceso para ambos países, generando nuevas tensiones, ansiedades y costos, sobre todo por los procesos inflacionarios que desencadenará”, precisó el ex mandatario, quien concretó la firma del mismo durante su mandato.
“Matar el TLCAN”, dijo, desembocaría en el aumento del desempleo en México, situación que traería “más migración de la que cualquier muro podría detener”.
Salinas publicó un artículo en London School of Economics and Political Science, en su blog sobre América Latina y el Caribe, en el que pidió que se modernice el Trtado con el fin de incrementar su productividad.
Agregó que Trump en Estados Unidos, Justin Trudeau en Canadá y Enrique Peña Nieto en México deben trabajar juntos, pues este modelo de apertura económica ha generado que las tres naciones sean competitivas; lo cual no sucede bajo acciones “paternalistas”.
Recordó que “abordando nuestras diferencias y canalizando nuestros respectivos intereses, comenzamos a superar una larga historia de conflictos. A veces éramos aliados, a veces adversarios, pero siempre dentro de un marco de dignidad y respeto (…) El mismo enfoque debe prevalecer de nuevo hoy, especialmente con los nuevos retos presentados por Donald Trump”, destacó Salinas de Gortari.
El ex mandatario precisó que las exportaciones de petróleo se aceleraron hasta sumar mil millones de dólares diarios, sumados a productos de la canasta básica como chiles y jitomates; mientras que los salarios ligados al TLCAN, son 40% más altos que el resto, con un 90% de trabajadores sindicalizados.
Explicó que entre los beneficiados con la generación de empleos figuran 10 entidades estadounidenses, como Ohio, Michigan y Pennsylvania.
Una encuesta recabada por el Banco de México -entre 34 grupos de análisis y la consultoría económica del sector privado nacional y extranjero- muestra las variaciones de sus previsiones para 2017 y 2018, luego de la toma de protesta de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
En primer lugar las expectativas de inflación se dispararon de 4.13 (en su primera consideración) a 5.25 para 2017, mientras que para 2018 el impacto se aminoró al ir de 3.59 a 3.85.
Los especialistas consideraron que el Producto interno Bruto (PIB) ya no crecerá en 1.6% si no que lo hará únicamente en 1.49%; para el año de elecciones presidenciales en México será de 2.17% y no de 2.28% como predecían en diciembre.
El mandatario de origen republicano ha manifestado su interés por proteger su mercado interno así como a sus trabajadores regresando al modelo “América para los americanos”, no obstante, la dependencia de México debido a la llegada de remesas, exportaciones a la nación vecina e inversiones de sus transnacionales lo han puesto en la cuerda floja con la renegociación del Tratado; así como por la intención de edificar un muro fronterizo.
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